Como ya sabéis, me gustan mucho los juegos de mesa. Eso significa que cuando veo uno que me entra por el ojo, más tarde o más temprano, acabo haciéndome con él. Ese no es el caso del juego que hoy nos ocupa. La verdad, jamás imaginé cogerlo. No es que el programa no me guste, bueno, el español no me gusta nada. Aún recuerdo cuando vinieron a Avilés e hicieron cachopo..., en fin, es una de esas cosas que son para el olvido. O las polémicas sobre cómo seleccionan a los concursantes, también dignas del país del toro. Personalmente, prefiero el programa de Gordon Ramsay. ¡Hasta el de «Pesadilla en la cocina» de Chicote me parece mejor que el de Masterchef!
Entonces, os preguntaréis, ¿por qué te has cogido este juego colega? Fácil, porque eran 9€. El original cuesta casi los 30 (29,95€). Y por treinta euros no me cojo este juego ni borracho, pero por nueve me pareció una adquisición curiosa. Más por curiosidad que por otra razón.
Y es que hay veces en que compras un juego sabiendo que no te va a hacer mucha gracia, pero por el precio te merece la pena, al menos, probarlo. Otras veces coges un juego que piensas que te va a gustar mucho y te llevas un mazazo de la leche. En este caso, compré este juego que no daba ni un duro por él, al menos de primera mano, y resulta que ha sido toda una sorpresa. El programa gustará más o menos, pero es que el juego es para echarse unas risas. Al menos, en casa nos hemos reído un montón. Sí que ha sido una sorpresa, pero de las buenas.
Caja de juego |
Juego de mesa para 3 a 6 jugadores.
Tiempo de juego unos 30 minutos aproximadamente.
Dificultad: Baja.
Rejugabilidad: Media- alta.
Cooperativo o competitivo: Competitivo.
Idioma: Español.
LOS COMPONENTES:
Ya conocéis cuál es mi idea de hacer una reseña de un juego. Os cuento algo sobre él y luego paso a hablar de los materiales, las reglas y unas conclusiones finales. Vamos a empezar por los componentes. ¿Recordáis que en mi reseña de Aliens: Hadley's Hope os decía que todo era cartón? Bueno, pues aquí tres partes de lo mismo. Sí bien no tiene tanto cartón como el otro, pero claro, tampoco tiene tantas piezas. El único plástico que trae es el de las bases de los «peones».
Y cartas. Muchas cartas.
Y es que, esencialmente, es un juego de cartas.
Los componentes están bien ilustrados, las imágenes de los ingredientes y las recetas están muy logradas y se ven con claridad. El cartón no es de mala calidad y hay acabados brillantes en los impresos. Las bases de plástico cumplen perfectamente su función y no hay nada que esté mal troquelado, en ese aspecto el juego está muy bien cuidado.
El manual de reglas es un folleto a una tinta impreso en tamaño Din-A5. Es sencillo de leer y de consultar, su única pega es que pare rellenar hueco meten más texto del necesario para explicar alguna que otra regla.
Incluye también un gorro de chef, tamaño niño todo hay que decirlo, muy simpático que sirve para indicar quién es el jugador inicial (sí, poniéndoselo). A mi no me abrocha^^.
También hay fichas de jugador, que vienen representados por enseres de cocina y fichas de votación de forma redonda por colores con las imágenes de las fichas de jugador.
Dos tableros para mejor y peor plato y una ficha de cartón con el resumen de la votación (muy útil).
Marcador de turno |
LAS REGLAS:
El juego se compone de dos variantes de juego: La básica y la extendida.
La forma de juego básica es muy sencilla, consiste en repartir seis ingredientes por jugador, estos, deben elegir cuatro y con ellos formar un plato que deben explicar y poner nombre. Luego cada jugador vota a los platos de los demás jugadores, no puede votarse a si mismo ya que carece de fichas de votación para su plato, al mejor y peor plato. Una vez han votado todos, el jugador inicial voltea las fichas y aquel que más votos haya recibido en el tablero de mejor plato, recibe un punto. Dos puntos is ha recibido más de un voto y todos aquellos que hayan votado al ganador a peor plato reciben también un punto.
Luego el que ha ganado al mejor plato recibe una carta de mejor plato y el de peor plato lo mismo pero de peor plato. Estas cartas suman, restan o ni suman ni restan puntos. Las de mejor plato suman 1 o 2 o 0 y las de peor plato -1,-2 o 0.
Quién más puntos tenga tras tres rondas, gana. Sencillo.
Cada ronda la comienza un jugador diferente, aquel que en la anterior haya tenido el mejor plato.
La modalidad extendida se basa en el modelo de televisión: La Caja Misteriosa, La Prueba de invención y La Prueba de Presión.
Las dos primeras se parecen mucho a la básica. De hecho, la primera es la básica con la diferencia de que los jugadores, una única vez, pueden intercambiarse dos ingredientes (uno a la izquierda y otro a la derecha), pero todos deben hacerlo por lo cual al final deben quedarse con 4 ingredientes y desechar 2. Como en la básica.
La prueba de invención consiste en colocar 5 cartas de ingredientes boca abajo sobre la mesa y una boca arriba que todos deben usar para inventar un plato. Los jugadores, todos a la vez, van mirando las cartas boca abajo. Si hay un ingrediente que al jugador le vale, lo coloca boca abajo en su zona de juego, si no, lo deja boca arriba junto a las demás. Una vez todos tengan sus cinco ingredientes, podrán intercambiarse hasta dos como en la prueba anterior, pero, sí o sí, deben usar la carta destapada desde un principio.
En lo demás igual que en la versión básica.
La caja misteriosa es es la gran variante del juego. Y digo gran porque en esta no se usan las cartas de ingredientes, si no, las cartas de receta. Consiste en que, partiendo del jugador a la izquierda del jugador con el gorro, debe escoger dos recetas por su imagen, sin darle la vuelta, e intentar adivinar qué ingredientes tiene. Si acierta recibe 1 punto, si falla, queda eliminado de esa ronda y pasa al siguiente jugador que hará lo mismo. El jugador con el sombrero es quien puede mirar la lista de ingredientes y decir, sin mentir, si lo tiene o no (ojo que aquí hay trampa!!!).
Cuando el último jugador falle, se termina esa ronda, y el siguiente jugador escoge otro plato entre dos cartas y se repite el proceso, esta vez, pasando el sombrero al jugador que inició anteriormente la ronda. Al final, todos los jugadores intentan adivinar los ingredientes.
Se hace recuento de puntos, y quién más tenga gana. Si hay empate, ganan ambos jugadores.
Muy friendly el juego.
Tablero de mejor y peor plato |
CONCLUSIONES:
El juego es muy divertido y es, claramente, familiar. Esto no creo que haya que decirlo, ¿verdad?^^. Es fácil echarse unas risas a la hora de crear los platos.
A favor:
Divertido. Fácil y rápido de jugar.
En contra:
Se acaba haciendo repetitivo, inevitablemente. Algunas recetas no tienen bien los ingredientes (ejemplo: No hay levadura en una receta de bizcocho). No deja de ser un juego para promocionar un formato de programa, a mi ver, mal adaptado.
¡Hasta la próxima con un juego nuevo o viejo!